¿Estamos cerca de curar la diabetes?

Una de las principales causas de insuficiencia renal (es decir, de la enfermedad que impide que los riñones "limpien" adecuadamente la sangre de las personas) es otra enfermedad: La diabetes. El organismo de las personas diabéticas no puede controlar la cantidad de azúcar que tienen en la sangre, lo que dificulta el trabajo de los riñones y, a la larga, los deteriora. 

La diabetes se considera incurable. Pero acaba de ocurrir un descubrimiento científico que podría cambiar esa historia. Para entenderlo, es importante que expliquemos, rápidamente y de manera sencilla, cómo "funciona" la diabetes. 




El azúcar en la sangre

Lo normal es que cuando la glucosa (el azúcar, una fuente de energía que obtenemos de los alimentos) ingresa a la sangre un órgano llamado páncreas produzca una sustancia (una hormona) llamada insulina. La insulina se encarga de llevar a esa azúcar a los músculos para mantenerlos funcionando adecuadamente. "Lo que sobra", es decir, el exceso de azúcar, es llevado a las células grasas o al hígado, en donde se almacena hasta que sea necesario. Pero cuando alguien tiene diabetes la insulina o bien no funciona correctamente (diabetes 2) o bien ni siquiera se produce (diabetes 1) en las cantidades adecuadas, lo que hace que se descontrolen los niveles de azúcar en la sangre. 

Ratones diabéticos

Y aquí es donde entra el experimento que mencionábamos al principio. Un grupo de científicos ha logrado curar la diabetes en ratones. Los han mantenido sanos durante un año luego del tratamiento y sin tener efectos secundarios. Por supuesto que hay que ser cautos. Hay que hacer pruebas con otros animales y sólo cuando los médicos estén seguros de tener los riesgos controlados, empezar las pruebas en humanos. Pero los investigadores creen que es el inicio de un camino hacia la cura definitiva. ¿Cómo lo consiguieron? 

Lo que se hizo fue incrementar las células que producen insulina en el páncreas de esos ratones. Esto se hizo de una manera muy ingeniosa. A través de un virus "modificado" al que se le colocaron genes seleccionados se "infectó" las células del páncreas de los ratones, haciendo que se "transformen" y empiecen a producir insulina aquellas que antes no lo conseguían. De esa manera el cuerpo de los ratones empezó a controlar de manera "natural" los niveles de azúcar en la sangre. 

Está claro que aún hay que recorrer un largo camino para que esta terapia experimental se pueda probar en humanos. Pero de todos modos el hallazgo es prometedor y ha generado expectativa en la comunidad médica. 

Más información

La investigación fue realizada en el Centro de Estudios de la Salud de San Antonio de la Universidad de Texas (EEUU). Una nota de prensa puede leerse en el siguiente enlace (en inglés, clic aquí)
Sobre la diabetes puede encontrarse información en el siguiente enlace : Clic aquí



Un artículo de contenidoweb.net para Clínica Urozen 


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