Nuevas esperanzas contra el cáncer avanzado (inmunoterapia)

Todos tenemos un "ejército" de defensa en el cuerpo. Está compuesto por diferentes tipos de glóbulos blancos (linfocitos, anticuerpos, células T etc) que "viven" en nuestra sangre y en nuestros ganglios. Los glóbulos blancos tienen una misión clave: Combatir los virus y las bacterias infecciosas cuando nos hacemos una herida o nos enfermamos. Este ejército protector forma parte de nuestro Sistema Inmunológico.

Pero cuando lo que nos ataca es el cáncer, los linfocitos (un tipo de glóbulo blanco especializado en destruir células dañinas) no se dan por aludidos y no hacen nada para combatir los tumores, dejándolos crecer a su gusto. Los cientificos han descubierto que las células cancerígenas "engañan" a los linfocitos, haciéndoles "creer" que son inofensivas. Evitar ese "engaño" es el principal objetivo de los nuevos tratamientos contra el cáncer conocidos como el nombre genérico de Inmunoterapia. 




La clave: Activar y desactivar proteínas.

¿Cómo es posible que un tumor engañe a un experto en seguridad como un linfocito? La ciencia ha descubierto que muchas células cancerígenas tienen en su cara exterior una proteína llamada PD1 . Cuando los linfocitos se acercan a la célula enferma "reconocen" la proteína PD1 y dejan que se una con otra proteína que tienen los linfocitos, llamada PDL-1 . Si la unión se produce el linfocito "cree" que el tumor es inofensivo. Es decir, esa unión evita que el organismo se defienda y permite que los tumores cancerosos sigan creciendo sin que nadie los moleste. 

Entonces la clave está en evitar la unión de esas proteínas. Y eso es exactamente en lo que están trabajando varios laboratorios farmacéuticos en el mundo.  O bien bloqueando las proteínas protectoras del tumor o bien bloqueando las del linfocito. Basta que una esté bloqueada para que la protección del tumor se termine y el linfocito pase a la ofensiva. Las ventajas de un tratamiento como éste son muchas, porque al ser el mismo cuerpo el que combate el cáncer los efectos secundarios sobre el cuerpo del enfermo son menores, evitando esa caída en su calidad de vida que producen las cirugías y la quimioterapia.

Primeros éxitos

En abril la Comisión Europea de Medicamentos ya aprobó medicamentos de este tipo que funcionan en algunos casos de cáncer de pulmón, cabeza, cuello, piel y próstata. 

Y hace unos días la Agencia Norteamericana de Medicamentos (FDA) ha hecho lo mismo con otro medicamento que ha mostrado resultados en los casos graves de cáncer de vejiga avanzado, uno de los más letales y difíciles de curar. Cuando la quimioterapia y la cirugía fallan, el paciente con cáncer de vejiga avanzado normalmente está condenado a morir antes de los seis meses. Pero un 20% de los pacientes que participaron en una investigación reaccionaron bien al medicamento (llamado atezolizumab). Un año después de iniciado el tratamiento no habían empeorado. Y aunque aún no se conoce lo que pasará con ellos en los próximos meses, el sólo hecho de duplicar el tiempo de sobrevivencia (de 6 meses a un año) ya es considerado un éxito.

Es cierto que aun estamos lejos de encontrar la cura definitiva contra el cáncer. Pero, al menos, estos tratamientos constituyen un nuevo avance que permite prolongar la vida de los pacientes sin causarles graves efectos secundarios. 

Más información
  • Sobre la inmunoterapia contra el cáncer, consultar este artículo del diario El País. Clic aquí
  • Sobre el medicamento atezolizumab, clic aquí



Un artículo de contenidoweb.net para Clínica Urozen 


Comentarios